domingo, 26 de abril de 2020

Recomendaciones sanitarias contra el coronavirus para los más pequeños

Recomendaciones sanitarias contra el coronavirus para los más pequeños

El coronavirus mantiene las alarmas activadas en muchos países. Aquí te contamos algunos datos sobre él y recomendaciones para los pequeños de la casa.

El coronavirus es el virus que mantiene activadas todas las alarmas y que ha interrumpido la vida normal de algunos países. Son miles de casos los que se han declarado en todo el mundo. En este artículo te contamos algunos datos generales y algunas recomendaciones sanitarias contra el coronavirus para los más pequeños de la casa.

Recomendaciones sanitarias contra el coronavirus

¿Qué es el coronavirus?

Los coronavirus son una familia de virus que suelen afectar a animales. Dentro de esta familia, hay muchos tipos diferentes. Algunos de ellos pueden mutar y acabar infectando a las personas.

Este es el caso de la cepa SARS-CoV-2. Esta cepa se detectó por primera vez en la ciudad china de Wuhan en diciembre de 2019. Desde entonces, su facilidad de propagación ha hecho que el número de casos a lo largo de todo el mundo aumente de forma drástica.

¿Qué síntomas produce?

Para la mayoría de personas infectadas, el coronavirus pasa como una infección asintomática, es decir, la persona no presenta ningún signo que nos haga ver que está enferma. Lo más común, sobre todo en los niños, es que produzca síntomas leves e inespecíficos, como un catarro cualquiera.

Sobre todo, estos síntomas son tos seca, fiebre y sensación de falta de aire. También puede producir dolor muscular, cansancio y malestar general.

Sin embargo, no siempre es así. En una minoría de casos, este virus puede producir una neumonía o incluso hasta muerte por fallo respiratorio. Estos casos se producen, sobre todo, en población susceptible, como los ancianos, o con un sistema inmune deprimido.

¿Cómo se transmite el coronavirus?

La transmisión del virus entre personas se produce por pequeñas partículas que viajan en el aire. Cuando una persona infectada tose o estornuda, estas partículas salen y pueden viajar 1 o 2 metros. El virus puede transmitirse, incluso, cuando la persona infectada no presenta síntomas.

Estas partículas pueden quedar en objetos de uso cotidiano como mesas, pomos de la puerta, etc… O caer directamente sobre alguien. Cuando una persona que no está infectada toca algún objeto infectado y con sus manos se toca después ojos, nariz o boca, el virus puede entrar en esta persona.

¿Se puede tratar el coronavirus?

Aunque aún no existe un tratamiento curativo específico para este virus, se están probando algunos antivirales que parecen funcionar, sobre todo para utilizarlos en los casos graves.

El tratamiento, además, será el de los síntomas. Este será sometido con analgésicos y medicamentos para la fiebre, en caso de que se produzca.

Hay que tener en cuenta que es un virus, por lo que los antibióticos nunca serán eficaces, y es una medida errónea utilizarlos como prevención o tratamiento.

¿Cómo podemos evitar contagiarnos?

Estas recomendaciones sirven tanto para los pequeños de la casa, como para los adultos. Evitar el contagio va a depender de las medidas de precaución y de higiene que tomemos. Algunas medidas que deben llevarse a cabo son:

Al toser y estornudar, tápate la nariz y la boca con el codo flexionado.

Evita tocar continuamente boca, nariz y ojos.

Usa pañuelos desechables y tíralos después de cada uso.

Por último, la medida más importante es la higiene de manos.

Recomendaciones sanitarias contra el coronavirus: ¿por qué es tan importante la higiene de manos?

Las manos son la parte del cuerpo que usamos constantemente para todo. Con ellas tocamos los distintos objetos, a las personas y a nosotros mismos, por lo que son el medio de transmisión más frecuente.

Lavarse las manos es fundamental para disminuir el riesgo de contagio. Es necesario que todos nos lavemos las manos varias veces al día, sobre todo después de ciertas situaciones como:

Antes y después de ir al baño.

Tras estornudar, toser o sonarse la nariz.

Después de tener contacto con alguien que estornuda o tose.

Al tocar objetos de uso público como, por ejemplo, partes del metro o el autobús.

Antes de comer.

Es importante lavarse las manos el tiempo correcto y frotando con agua y jabón todos los dedos, dorso y palma, para que no quede ninguna zona sin limpiar. Si es necesario, se repetirá el proceso. Por último, nos secaremos las manos con una toalla desechable.

Por tanto, en lo que a las recomendaciones sanitarias contra el coronavirus respecta…

Inculcar esto a nuestros hijos para que lo apliquen en su día a día es fundamental para que ellos también actúen activa y correctamente. Por supuesto, también tendremos que animarlos a que avisen a un adulto ante cualquier síntoma que puedan notar para que se tomen las medidas necesarias.

sábado, 25 de abril de 2020

Cómo limpiar el móvil para prevenir el contagio del coronavirus

Cómo limpiar el móvil para prevenir el contagio del coronavirus

El teléfono móvil es uno de los objetos que tenemos que desinfectar de forma adecuada para prevenir el contagio del Covid-19. ¿Cuáles son las recomendaciones? Algunas compañías revelaron cómo hacerlo.

Las alertas debido a la propagación del Covid-19 en el mundo han obligado a los Estados a tomar medidas preventivas drásticas. Desde no salir de casa, hasta lavarse las manos y desinfectar el hogar, son simples pero importantes las acciones que todos podemos poner en práctica. Ahora bien, ¿también deberíamos limpiar el móvil?

Este interrogante surge por un motivo muy especial: la mayoría de nosotros solemos tener contacto con su superficie la mayor parte del tiempo. Además, lo acercamos a la cara para atender llamadas, a la boca para enviar grabaciones y hasta dejamos que otros lo utilicen en algún momento.

Si bien hasta el momento no hay informes de casos de contagio por el contacto con este tipo de dispositivos, los científicos creen que, como sucede con otros virus semejantes, es posible que el Covid-19 pueda permanecer en las pantallas de los móviles. Por ello, resulta conveniente limpiarlas.

Recomendaciones para limpiar y desinfectar el móvil

Según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades​ (CDC), es importante establecer las diferencias entre limpiar y desinfectar. En el proceso de limpieza nos deshacemos de la suciedad y de algunos gérmenes, sin llegar a matar estos últimos. En cambio, la desinfección emplea productos químicos que ayudan a matar los gérmenes de las superficies.

Según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades​ (CDC), es importante establecer las diferencias entre limpiar y desinfectar. En el proceso de limpieza nos deshacemos de la suciedad y de algunos gérmenes, sin llegar a matar estos últimos. En cambio, la desinfección emplea productos químicos que ayudan a matar los gérmenes de las superficies.

Considerando esto, más allá de remover la suciedad evidente del móvil, debemos procurar desinfectarlos para reducir el riesgo de propagación del coronavirus. Recordemos que es uno de los elementos que más usamos a lo largo del día, y también uno de los que más ignoramos en lo que tiene que ver con la limpieza. ¿Qué podemos hacer?

Evitar el uso de químicos agresivos

El móvil es uno de los elementos que más usamos a lo largo del día. Por ello, como medida preventiva ante la crisis por el Covid-19, es conveniente limpiarlo.
En primer lugar, hemos de tener en cuenta que el móvil tiene unas características especiales que requieren cuidado. En su mayoría, cuentan con una cubierta oleófuga – repele los aceites – cuya función es ayudar a mantener limpia la pantalla y evitar que queden marcas como las huellas dactilares.

Dicha capa requiere un trato especial, pues su función es protectora y puede resultar afectada por la aplicación de productos químicos. Sabiendo esto, hemos de evitar el uso de soluciones con lejía o agentes de limpieza convencionales.

Emplear paños suaves

El paño que empleamos para limpiar el móvil debe ser de telas suaves que no desprendan pelusas, como las que suelen dar en las ópticas al momento de comprar lentes nuevos. El uso de estropajos, esponjas o paños muy abrasivos también pueden ocasionar daños e imperfecciones en el dispositivo.

Compañías como Apple y Google han recomendado apagar el teléfono antes de iniciar cualquier proceso de limpieza. Además, para dejarlo completamente limpio, aconsejan humedecer el paño con un poco de agua y jabón. Eso sí, debemos evitar que la humedad entre en las aberturas del móvil.

Usar toallitas desinfectantes para limpiar el móvil

Las toallitas desinfectantes son una buena opción para desinfectar las pantallas de los dispositivos móviles.

Debido a la problemática actual por el brote de coronavirus (Covid-19), Apple actualizó su página web con información relevante sobre cómo desinfectar el móvil. Al respecto, nos dicen que es seguro limpiar el iPhone y sus demás productos con toallitas desinfectantes

Puedes pasar con cuidado toallitas impregnadas en alcohol isopropílico del 70% o toallitas desinfectantes de la marca Clorox por las superficies exteriores del iPhone. No uses lejía. Evita que entre humedad por las aberturas y no sumerjas el iPhone en ningún agente limpiador. – señalan.

Una solución de agua y alcohol

En una publicación para la revista Health, el microbiólogo Charles Gerba da sus propias recomendaciones para limpiar el móvil por estos días. Según el experto, podemos emplear un paño de microfibra que esté ligeramente humedecido con una solución de 60 % de agua y 40 % de alcohol.

Con este preparado también debemos tener precaución, ya que la mezcla no se debe aplicar de manera directa sobre el smartphone porque puede dañarlo. Lo ideal es usar una pequeña esquina del paño para quitar el exceso de líquido

Lavar las manos frecuentemente

Por último, y no menos importante, debemos enfatizar de nuevo en el hábito de lavarnos las manos varias veces al día. Entidades como la Organización Mundial de la Salud (OMS) destacan que el lavado habitual de las manos con agua y jabón, o con un desinfectante a base de alcohol, ayuda a inactivar el virus en caso que esté presente en las manos.

Esto, por supuesto, complementa la limpieza y desinfección del móvil, cuyo contacto con las manos es bastante frecuente. De hecho, es algo que debemos hacer incluso cuando no hay alertas como la que estamos atravesando.
Recomendaciones sanitarias contra el coronavirus para los más pequeños

El coronavirus mantiene las alarmas activadas en muchos países. Aquí te contamos algunos datos sobre él y recomendaciones para los pequeños de la casa.

El coronavirus es el virus que mantiene activadas todas las alarmas y que ha interrumpido la vida normal de algunos países. Son miles de casos los que se han declarado en todo el mundo. En este artículo te contamos algunos datos generales y algunas recomendaciones sanitarias contra el coronavirus para los más pequeños de la casa.

Recomendaciones sanitarias contra el coronavirus

¿Qué es el coronavirus?

Los coronavirus son una familia de virus que suelen afectar a animales. Dentro de esta familia, hay muchos tipos diferentes. Algunos de ellos pueden mutar y acabar infectando a las personas.

Este es el caso de la cepa SARS-CoV-2. Esta cepa se detectó por primera vez en la ciudad china de Wuhan en diciembre de 2019. Desde entonces, su facilidad de propagación ha hecho que el número de casos a lo largo de todo el mundo aumente de forma drástica.

¿Qué síntomas produce?

Para la mayoría de personas infectadas, el coronavirus pasa como una infección asintomática, es decir, la persona no presenta ningún signo que nos haga ver que está enferma. Lo más común, sobre todo en los niños, es que produzca síntomas leves e inespecíficos, como un catarro cualquiera.

Sobre todo, estos síntomas son tos seca, fiebre y sensación de falta de aire. También puede producir dolor muscular, cansancio y malestar general.

Sin embargo, no siempre es así. En una minoría de casos, este virus puede producir una neumonía o incluso hasta muerte por fallo respiratorio. Estos casos se producen, sobre todo, en población susceptible, como los ancianos, o con un sistema inmune deprimido.

¿Cómo se transmite el coronavirus?

La transmisión del virus entre personas se produce por pequeñas partículas que viajan en el aire. Cuando una persona infectada tose o estornuda, estas partículas salen y pueden viajar 1 o 2 metros. El virus puede transmitirse, incluso, cuando la persona infectada no presenta síntomas.

Estas partículas pueden quedar en objetos de uso cotidiano como mesas, pomos de la puerta, etc… O caer directamente sobre alguien. Cuando una persona que no está infectada toca algún objeto infectado y con sus manos se toca después ojos, nariz o boca, el virus puede entrar en esta persona.

¿Se puede tratar el coronavirus?

Aunque aún no existe un tratamiento curativo específico para este virus, se están probando algunos antivirales que parecen funcionar, sobre todo para utilizarlos en los casos graves.

El tratamiento, además, será el de los síntomas. Este será sometido con analgésicos y medicamentos para la fiebre, en caso de que se produzca.

Hay que tener en cuenta que es un virus, por lo que los antibióticos nunca serán eficaces, y es una medida errónea utilizarlos como prevención o tratamiento.

¿Cómo podemos evitar contagiarnos?

Estas recomendaciones sirven tanto para los pequeños de la casa, como para los adultos. Evitar el contagio va a depender de las medidas de precaución y de higiene que tomemos. Algunas medidas que deben llevarse a cabo son:

Al toser y estornudar, tápate la nariz y la boca con el codo flexionado.

Evita tocar continuamente boca, nariz y ojos.

Usa pañuelos desechables y tíralos después de cada uso.

Por último, la medida más importante es la higiene de manos.

Recomendaciones sanitarias contra el coronavirus: ¿por qué es tan importante la higiene de manos?

Las manos son la parte del cuerpo que usamos constantemente para todo. Con ellas tocamos los distintos objetos, a las personas y a nosotros mismos, por lo que son el medio de transmisión más frecuente.

Lavarse las manos es fundamental para disminuir el riesgo de contagio. Es necesario que todos nos lavemos las manos varias veces al día, sobre todo después de ciertas situaciones como:

Antes y después de ir al baño.

Tras estornudar, toser o sonarse la nariz.

Después de tener contacto con alguien que estornuda o tose.

Al tocar objetos de uso público como, por ejemplo, partes del metro o el autobús.

Antes de comer.

Es importante lavarse las manos el tiempo correcto y frotando con agua y jabón todos los dedos, dorso y palma, para que no quede ninguna zona sin limpiar. Si es necesario, se repetirá el proceso. Por último, nos secaremos las manos con una toalla desechable.

Por tanto, en lo que a las recomendaciones sanitarias contra el coronavirus respecta…

Inculcar esto a nuestros hijos para que lo apliquen en su día a día es fundamental para que ellos también actúen activa y correctamente. Por supuesto, también tendremos que animarlos a que avisen a un adulto ante cualquier síntoma que puedan notar para que se tomen las medidas necesarias.

CORONAVIRUS Mantener la calma en situaciones de crisis: coronavirus

CORONAVIRUS
Mantener la calma en situaciones de crisis: coronavirus

La crisis causada por el coronavirus en todo el mundo está llevando a miles de personas a estados de ansiedad, miedo y otras emociones difíciles. Por ello, en este espacio vamos a detallar algunas estrategias importantes para mantener la calma.

Mucho se está hablando y se seguirá hablando sobre el coronavirus, el virus culpable y responsable del cambio que está sufriendo la sociedad, tanto en la forma y en la manera de relacionarnos como en las rutinas diarias. Una situación que nos acerca a una realidad impensable hasta hace bien poco: teletrabajo, compras compulsivas, cierre de centros escolares, cancelación de viajes, nuevos protocolos más estrictos de limpieza y desinfección, reducción de cualquier actividad de ocio grupal, masificación de hospitales y centros de salud, entre otros.

Enciendes la televisión y no dejan de hablar de ello, lees las noticias online y aparecen de manera constante los titulares, hablas con la gente y no se escucha otra…CORONAVIRUS, CORONAVIRUS y más CORONAVIRUS.

Toda esta situación está haciendo que la persona de la calle, el ciudadano de a pie, entre en pánico, pierda la calma, se dispare su ansiedad, esté gobernado por preocupación excesiva incontrolable e inmanejable, problemas para conciliar el sueño, miedos irracionales y se obsesione de manera exacerbada y desproporcionada por sus sensaciones físicas, con el único objetivo de protegerse del contagio.

Pero para las personas que además tengan ciertos diagnósticos como hipocondría, ansiedad generalizada, trastorno obsesivo-compulsivo u otras patologías, las consecuencias pueden ser aún peores. De hecho, es muy probable que esta situación que nos está tocando vivir, se vuelva mucho más difícil para ellos.

Estrategias para minimizar el impacto psicológico del COVID-19

Para todas aquellas personas que en este momento de crisis mundial sientan ansiedad, se agobien por no poder salir de casa o por la falta de contacto con otras personas ofrecemos a continuación una serie de estrategias.

Se trata de ejercicios desarrollados desde el marco de la psicología positiva para potenciar tres fortalezas personales con el objetivo de aliviar esta sensación general de angustia y preocupación.

1. Análisis

La fortaleza del análisis predispone a las personas a procesar diferentes fuentes de información, además de favorecer el proceso del darse cuenta, evaluar diferentes aspectos de una situación, reconocer patrones o decidir qué tipo de información es útil o irrelevante para una decisión determinada.

Cuando esta fortaleza está muy presente en la persona, puede verse perjudicada en situaciones de crisis, ya que provoca que se pase demasiado tiempo rumiando y dándole vueltas a las cosas, llegando al bloqueo, sin ser capaz de avanzar y generando cierto malestar.

RECOMENDACIÓN

Restringe la entrada de información que recibes desde las noticias. Puedes estar al día, pero no cambiará nada el que veas más de media hora al día las noticias. Intenta que tu rutina no gire en torno al coronavirus, cuanto más tiempo hablamos de ello más está en nuestra mente y más emociones desagradables nos suscita. Y, sobre todo, ponle freno a las anticipaciones, quédate con lo que estás viviendo en cada momento. No sabemos a ciencia cierta la evolución que tendrá en cada caso particular, por lo que no tiene sentido que le dediques tu tiempo psicológico a pensar en todos los posibles males que pueden llegar a ocurrir.

2. Armonía

La fortaleza de la armonía es fundamental ante las situaciones más críticas. Se manifiesta como la capacidad de mantener la calma ante situaciones emocionalmente difíciles, sean situaciones interpersonales o conflictos internos. Por ejemplo, el coronavirus es una buena oportunidad.

Si la armonía está en equilibrio ante momentos complicados, es más fácil mantener la calma y la serenidad. Por lo tanto, si la persona se siente sobrepasada y fuera de control, es fundamental abordar y trabajar esta fortaleza.

RECOMENDACIÓN

Aprovecha ahora que estás en casa para ponerte audios para meditar y vaciar tu mente de pensamientos; el mindfulness es una herramienta eficaz para manejar la atención y regular tus emociones.

3. Positividad

La fortaleza de la positividad hace alusión a la tendencia de quedarse con lo bueno de las situaciones presentes, pasadas y futuras focalizando la atención en los elementos favorables de sus experiencias vitales.

RECOMENDACIÓN

Haz un diario en tu móvil o en un folio que pongas en la nevera donde cada vez que pases apuntes algo que haya salido bien, algo que te haya gustado, que te ayude a tenerlo presente y a focalizar tu mente también en la parte positiva; de esta forma, conseguirás equilibrar el resto de información que recibes.

Te animamos a convertir esta experiencia en un espacio de desarrollo del que sacar algo bueno. Va a ponerte a prueba, eso seguro, tanto a nivel físico como emocional, por eso cuidar tu mente es también importante.

Ahora bien, si notas que tu miedo ante lo que está ocurriendo se descontrola o te desborda, que estás mucho más nervioso de lo habitual, que no eres capaz de gestionarlo de forma normal y que afecta a tu vida personal y laboral, puedes solicitar ayuda a un profesional para trabajarlo juntos y aprender esas estrategias que podrás poner en marcha ante esta situación de crisis del coronavirus y otras que en un futuro puedan llegar.

viernes, 24 de abril de 2020

CORONAVIRUS ¿Se pueden contaminar los alimentos con el coronavirus?

CORONAVIRUS
¿Se pueden contaminar los alimentos con el coronavirus?

Con todo el miedo que se ha despertado debido a la propagación del coronavirus, muchos se preguntan si es posible que pueda contraerse a través de los alimentos. En este artículo detallamos lo que se sabe hasta el momento.

A raíz de las alertas asociadas con el coronavirus (Covid-19), muchas personas se preguntan si el virus puede llegar a contaminar los alimentos. Al fin y al cabo, la mayor parte de las estrategias contra esta pandemia mundial se enfocan en la prevención. ¿Qué debemos saber al respecto?

En primer lugar, hemos de tener claro que en nuestras manos está retrasar o evitar el crecimiento de los contagios para que las entidades sanitarias puedan destinar de manera adecuada los recursos disponibles para hacer frente a la situación. En este sentido, medidas como lavarnos las manos, desinfectar el hogar y quedarnos en casa puede ayudar.

Entidades como los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades sugieren que el virus puede mantener activo en algunas superficies, lo que podría generar contagio si la persona tiene contacto y luego se toca la boca, la nariz o los ojos. Pero, ¿es posible que el virus contamine los alimentos?

Alimentos y coronavirus: no existe evidencia

La Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA) informó a través de un comunicado que no existen estudios que puedan confirmar que los alimentos sean una vía de contagio de coronavirus. Hasta la fecha, no hay reportes de casos de transmisión del virus por la ingesta de algún alimento.

No obstante, respecto a esto, son necesarias más investigaciones que permitan contrastar estos resultados y establecer una conclusión firme. Lo que sí sabemos con certeza es que el virus el poco resistente al calor. Por este motivo, el cocinado completo de los alimentos debería reducir mucho el riesgo de contagio mediante la alimentación.

Sabiendo esto, debemos evitar el consumo de alimentos crudos, sobre todo cuando hablamos de aquellos de origen animal. Es necesario extremar las medidas de precaución dentro del ámbito de la alimentación, para de este modo impedir la propagación del virus.

Hasta la fecha no hay evidencias que confirmen que los alimentos pueden ser una vía de contagio para el coronavirus (Covid-19). Sin embargo, es importante adoptar medidas preventivas.

Hay poco conocimiento sobre el coronavirus

A pesar de la creencia de que su transmisión a humanos procede del consumo de animales crudos, no existen muchos científicos sobre esta enfermedad. De hecho, la mayor parte de los artículos disponibles hablan sobre sus características epidemiológicas, pero no sobre tratamientos, factores de riesgo o prevención.

Por esta razón, se aconseja extremar la precaución. Aunque los alimentos no parecen ser un vector de contagio, es necesario extremar las medidas de higiene alimentaria. El cocinado completo de los alimentos y sus correctas medidas de descongelado aseguran la ausencia de organismos patógenos.

La necesidad de evitar el contacto para no propagar el coronavirus
Lo mejor que podemos hacer para evitar la propagación del virus es evitar los contactos entre personas y tener una correcta higiene de manos, sobre todo después de tocar superficies o manipular objetos. Antes de realizar cualquier preparación culinaria es imprescindible una buena higiene de manos para asegurar la ausencia del virus en las mismas.

Tomar precauciones a la hora de estornudar o toser resulta fundamental para reducir el radio de acción del virus. Es momento de hacer caso a las advertencias sanitarias y de estar atento a las noticias.

Se siguen estudiando los métodos de propagación del virus y en breve tendremos más información de su capacidad para sobrevivir en los alimentos. De momento, lo mejor es consumir aquellos sometidos a un buen proceso de envasado.

Una adecuada higiene de las manos antes de manipular los alimentos es determinante para reducir cualquier riesgo de contaminación sobre los mismos.

Coronavirus y alimentos: ¿qué debemos tener claro?

El desconocimiento del coronavirus y su rápida propagación están causando un estado de alarma y caos social. Resulta imprescindible mantener la calma y respetar las precauciones para disminuir en la medida posible la rapidez de los contagios. De este modo, es más probable que el servicio de salud sea capaz de atender con garantías a todos los pacientes que lleguen diariamente.

La higiene alimentaria es fundamental, al igual que la higiene de manos. Es preciso la cocción completa de los alimentos, aunque no se ha demostrado con certeza la posible presencia del virus en ellos.

Ante todo se recomienda prudencia y especial cuidado con las personas mayores y la gente de riesgo, a la cual el virus podría afectarles en mayor medida.

CORONAVIRUS Síntomas del coronavirus: ¿qué hay que saber?

CORONAVIRUS
Síntomas del coronavirus: ¿qué hay que saber?

La expansión de la infección por coronavirus en el mundo ha generado una circulación abrumadora de información que incluye datos erróneos sobre esta epidemia. Vamos a contarte en este artículo cuáles son los síntomas del coronavirus y cómo identificarlos.

Como bien es noticia en todos los medios desde hace semanas, la aparición de personas con síntomas de coronavirus en todo el mundo va en aumento aún. Las medidas se han vuelto más restrictivas y se están aplicando protocolos a pacientes sospechosos de inmediato.

El caso extremo es el de Italia, donde el gobierno del país ha dispuesto una cuarentena generalizada con limitación en el movimiento de sus ciudadanos y prohibición para la entrada y la salida de las fronteras. La economía ha reaccionado a esta detención de la actividad y una crisis global repercute en las bolsas y en las monedas.

Los ministerios de salud nacionales y locales han tenido que elaborar guías de actuación para los equipos sanitarios y para que la población esté informada. En algunos Estados el protocolo es de cumplimiento obligatorio con intervención policial de ser necesario, mientras que en otros son sugerencias para que los mismos ciudadanos se pongan en cuarentena si tienen factores de riesgo.

Lo que sí ha quedado claro es que, en tiempos de globalización, no hay región del planeta que pueda considerarse fuera del alcance. La epidemia se ha expandido gracias a las comunicaciones aéreas y al intercambio poblacional que es moneda corriente.

Del mismo modo, la información al respecto del coronavirus se llenó de mitos y falsedades difundidas en las redes sociales. La misma Organización Mundial de la Salud (OMS) tuvo que publicar un documento con consejos para la población sobre los rumores del nuevo coronavirus.

¿Qué es el coronavirus?

Antes de profundizar en los síntomas reales de la infección por coronavirus, conviene recordar a qué nos referimos cuando nombramos este microorganismo. Del conocimiento de su naturaleza proviene la base para que sepamos prevenirlo y detectarlo.

En realidad, los coronavirus son una familia de virus que existe desde mucho antes de este año. La designación genérica con la que nos referimos al brote actual es equívoca, porque esta cepa en particular tiene nombre.

Desde el 7 de enero de 2020 es que sabemos que esta variedad de coronavirus que se está contagiando es el 2019-nCov, rebautizado luego como COVID-19. Se trata de la cepa que inició su período contagioso en humanos a fines del año 2019 en la ciudad de Wuhan, China.

En el mundo se han enfrentado tres grandes brotes de coronavirus con transmisión humana, incluido este. El más recordado y llamativo fue el que se manifestaba con el síndrome respiratorio agudo severo (SARS).

Los coronavirus poseían una transmisión entre animales relativamente bien documentada. Lo que sucedió ahora es que una cepa cambió y se volvió contagiosa entre humanos, pudiendo expandirse más allá de un caso concreto para convertirse en epidemia.

Este brote epidémico de coronavirus es causado por la cepa COVID-19

¿Cómo se transmite el COVID-19?

La vía de infección del coronavirus que está actualmente en transmisión es el contacto mediado por las gotitas de la nariz o de la boca de individuos infectados. El virus viaja en el aire a través de estas gotas y penetra alguna mucosa de un receptor.

También sucede que las gotas caen en superficies donde el virus puede permanecer un tiempo. Si durante ese lapso una persona no enferma toca las gotas, y luego se toca con esa mano alguna mucosa –ojos, nariz o boca-, el contagio es posible.

Si bien se ha detectado presencia de coronavirus en heces de los pacientes, las investigaciones parecen considerar muy baja la probabilidad de propagación por esta vía.

Síntomas del coronavirus

¿Cómo saber, entonces, si me contagié con COVID-19? ¿Cuáles son los síntomas del coronavirus que puedo detectar precozmente? Al saber que se trata de un virus de transmisión por gotitas de la nariz y de la boca, es lógico asociarlo con síntomas relativos a la gripe.

Una tríada de signos son la presentación habitual de la enfermedad:

Fiebre

Tos seca

Falta de aire

Agotamiento o cansancio

Otros síntomas son menos frecuentes y más leves, además de no presentarse en todos los casos positivos, como la rinorrea –goteo nasal-, la odinofagia –dolor de garganta- y la diarrea. Inclusive hay infectados por COVID-19 que no presentan síntomas nunca.

Entre el 15 y el 20 % de los infectados evoluciona a una forma clínica grave de la patología. En general se trata de ancianos o enfermos con comorbilidades, como diabetes, hipertensión arterial, enfermedad pulmonar obstructiva, o inmunosuprimidos.

La designación de COVID-19 dio nombre a la cepa del brote actual

¿Cuándo consultar si sospecho tener síntomas de coronavirus?

Ante la presencia de uno de los tres síntomas de coronavirus que te mencionamos previamente, o la concurrencia de los tres, más el antecedente de contacto con un enfermo ya diagnosticado, o haber estado en las zonas con propagación, es motivo suficiente para consultar. No se debe demorar la atención inicial para tomar las muestras, analizarlas, aislar si es pertinente y comenzar las medidas de sostén.

Si eres un enfermo crónico,
inmunosuprimido o anciano, la fiebre debe alertarte de inmediato. Con más razón estas personas deben tomar contacto con el sistema de salud para recibir la atención adecuada y oportuna antes que sea tarde. Recordemos que la letalidad de este brote es muy notoria en pacientes con enfermedades previas.

No es necesario entrar en pánico, pero sí estar atentos. Con las medidas de prevención recomendadas más el aislamiento selectivo de los casos sospechosos será posible avanzar en el control de la c.

CORONAVIRUS Mitos sobre el coronavirus

CORONAVIRUS
Mitos sobre el coronavirus

Son muchos los mitos sobre el coronavirus que vienen circulando, principalmente a través de las redes sociales. El mundo se enfrenta a una situación muy seria y no es momento de prestar oídos o darle crédito a las informaciones que no provengan de fuentes confiables.

Junto con el COVID-19 han llegado toda una serie de mitos sobre el coronavirus. Las redes sociales, en particular, están llenas de noticias falsas, principalmente en lo que tiene que ver con las posibles curas para la enfermedad, o con los alcances y peligros de la pandemia.

Todos esos mitos sobre el coronavirus hacen daño, ya que crean confusión y eventualmente inducen a las personas a implementar prácticas que podrían ser riesgosas, o inútiles. Por lo mismo, la primera recomendación es la de consultar solamente fuentes autorizadas y confiables para evitar equívocos.

Lo que suceda con la pandemia va a depender, en gran medida, de nuestra capacidad para enfrentarla de una manera inteligente. Para lograr esto, lo mejor es obtener información de calidad y atender a las recomendaciones que hagan las autoridades de salud. Los siguientes son algunos de esos mitos sobre el coronavirus que se deben desterrar.

El coronavirus es una de las enfermedades más graves de la historia

Debido a la amplia cobertura informativa sobre esta enfermedad, se ha fomentado la idea de que esta es la pandemia más grave de la historia, cuando no es así. Lo que hace peligroso al coronavirus es su alta capacidad de contagio, más no su letalidad.

Otro de los factores que ha desatado las alarmas es el hecho de que se trata de un virus nuevo y, por tanto, desconocido. Como no se sabe mucho acerca de este, no es posible predecir cómo se comportará. A medida que pase el tiempo podrían encontrarse datos que aún no conocemos.

De momento, la tasa de mortalidad por esta enfermedad se ubica en aproximadamente un 3,2 %. Esto quiere decir que, por cada cien personas contagiadas, mueren tres. Aunque toda enfermedad que lleva a la muerte debe ser motivo de preocupación, en este caso solo una minoría tiene consecuencias fatales.

Muchos mitos circulan sobre el coronavirus, y eso hace más difícil el control de la pandemia

Es poco más que una gripe común

En el otro extremo de los fatalistas están quienes minimizan el peligro de la pandemia. Es cierto que en el 80 % de los casos esta enfermedad solo genera síntomas leves. Pero también es verdad que se trata de una patología que afecta los pulmones, que son órganos vitales.

Así mismo, aún no es clara la manera como se comporta el virus, ni tampoco se puede prever con certeza si va a presentar cambios o no. En pocas palabras, nos enfrentamos a una amenaza que no conocemos del todo. En una situación así, lo único inteligente es ser muy prudentes y no menospreciar los riesgos.

Además, como ya se señaló, este virus en particular es muy contagioso. Si aumenta el número de contagios, aumentarán también el número de muertes, ya que se incrementa el riesgo de que alcance a las personas más vulnerables, como los niños muy pequeños, los adultos mayores y quienes tienen debilitado su sistema inmunológico.

Los remedios caseros y los mitos sobre el coronavirus

Varios de los mitos sobre el coronavirus tienen que ver con el uso de algunos remedios caseros que podrían detener o curar la enfermedad. Al respecto hay que decir que no existe ninguna evidencia científica sobre la eficacia de tales remedios en este caso.

Se ha dicho, por ejemplo, que el ajo es capaz de detener la infección. Si bien la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha señalado que este vegetal tiene algunas propiedades antimicrobianas, lo cierto es que nada lleva a creer que sea eficaz contra el coronavirus. Lo mismo puede decirse de la plata coloidal y de los suplementos minerales «milagrosos» que algunos quieren poner de moda.

De momento no hay fármacos, ni mucho menos remedios caseros para tratar el coronavirus. Valga decir que es muy importante evitar la automedicación, ya que esto podría enmascarar los síntomas del COVID-19 y generar mayores riesgos para la salud.

Es un mito que el ajo puede combatir el coronavirus. No existe evidencia que respalde esta afirmación

La higiene no es un mito sobre el coronavirus

Lavarse frecuentemente las manos y aplicarse gel antibacterial son medidas para reducir el riesgo de contagio. Se estima que esta práctica permite disminuir hasta en un 50 % la posibilidad de adquirir el virus. Sin embargo, lo más eficaz es minimizar el contacto con otras personas y entrar en cuarentena si se tiene la sospecha de haber estado expuesto.

No es cierto que el desinfectante casero se deba aplicar en las manos para elevar las posibilidades de evitar el contagio. Tampoco es verdad que la mascarilla facial, o tapabocas, impida el ingreso del virus. El COVID-19 solo permanece unas horas en los objetos, por lo que es difícil que se contagie por esa vía. Sin embargo, siempre es conveniente lavarse las manos después de tocar objetos que han pasado por muchas manos.

jueves, 23 de abril de 2020

3 alternativas al gel desinfectante

3 alternativas al gel desinfectante

En vista de la crisis mundial que ha generado el Covid-19, la demanda de productos como el gel desinfectante ha llegado a niveles muy altos. De hecho, el producto ha agotado ventas y sus precios se han elevado a cantidades indecentes. Proponemos algunas alternativas.

Con las alertas que se han encendido debido a la propagación del Covid-19, no es extraño que productos como el gel desinfectante empiecen a faltar en los estantes de farmacias y supermercados. Debido a esto, hay quienes se preguntan si existen otras alternativas.

Aunque hay quienes llegan a pensar que este producto es superior a la hora de eliminar gérmenes en las manos, en realidad no siempre son la opción más eficaz. Además, muchos emplean soluciones antibacterianas en lugar de desinfectantes, lo que supone un problema si tenemos en cuenta que estamos ante un virus y no una bacteria.

Gel desinfectante: lo que debes saber

Si de medidas preventivas contra el coronavirus se trata, hay que verificar que el gel desinfectante tenga propiedades virucidas.

Pues bien, lo cierto de todo es que sí hay otros productos que pueden asegurar una buena higiene a la hora de intentar reducir el riesgo de infección por este virus. De hecho, según información de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC), el gel desinfectante no es la primera opción.

En vista de la crisis mundial que ha generado el Covid-19, la demanda de productos como el gel desinfectante ha llegado a niveles muy altos. De hecho, el producto ha agotado ventas y sus precios se han elevado a cantidades indecentes. Proponemos algunas alternativas.

No obstante, respecto al uso de este producto se están cometiendo algunos errores. En primer lugar, muchos no están teniendo en cuenta que el gel desinfectante es diferente al gel antibacterial. La función del gel antibacterial es eliminar las bacterias o impedir su crecimiento. En el caso del coronavirus nos estamos refiriendo a un virus y, por tanto, lo correcto es usar productos con capacidad virucida.

A menudo, las fórmulas que son virucidas también son bactericidas. Sin embargo, estas deben contener como mínimo un 70 % de alcohol. Pero, como explica la farmacéutica Mar Sieira al diario La Vanguardia Española, el gel debe contener más que alcohol. Para que actúe contra los virus, el producto debe contener etanol.

Así pues, tampoco es correcto optar por aquellas presentaciones que contienen brillantinas, perfumes y otros componentes que lo hacen visiblemente atractivo, pero poco efectivo. Para estar más seguros, hay que revisar las etiquetas y determinar si tienen las propiedades mencionadas.

Alternativas al gel desinfectante

Cuando se trata de reducir los riesgos asociados al coronavirus, e incluso a otros virus, hay alternativas al gel desinfectante. De hecho, este último no es precisamente la mejor opción. La comunidad médica y científica señala que hay alternativas más eficaces que, incluso, están al alcance de todos.

Tal es el caso del jabón, que ha ganado protagonismo en medio de las crisis que vive el mundo por el Covid-19. A continuación detallamos por qué es más eficaz y qué otras opciones podemos tener en cuenta.

1. Agua y jabón

Lavarse las manos con agua y jabón durante 20 segundos ayuda a inactivar los virus. Por eso, es una de las mejores opciones preventivas.
Lavarse las manos con agua y jabón es una de las alternativas más importantes al gel desinfectante. Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades lo sugieren como una primera opción preventiva ante la amenaza del coronavirus.

Respecto a esto, nos recomiendan un lavado de al menos 20 segundos, sobre todo después de estar en lugares públicos, sonarse la nariz, toser o estornudar. ¿Por qué agua y jabón? Hay razones científicas que lo explican.

El coronavirus está protegido por una membrana de lípidos que se disuelve al contacto con el jabón. Esto produce un colapso en la estructura del virus, lo que permite inactivarlo. Lo más interesante es que funcionan todo tipo de jabones: líquidos, en barra, para ducha, íntimos, etcétera, siempre y cuando se empleen en conjunto con agua.

2. Toallas desinfectantes

Ante la escasez de gel desinfectante, otra opción que podemos tener en cuenta son las toallas desinfectantes. Son una buena alternativa cuando, por alguna razón, no podemos ir al lavamanos a usar agua y jabón. Además, también son útiles para limpiar superficies con las que solemos tener contacto directo y continuo.

Como en el caso del gel, es importante leer las etiquetas para determinar si solo son bactericidas o si también funcionan contra los virus. Su ventaja es que son desechables y, por lo tanto, el riesgo de propagación de los gérmenes disminuye. En todo caso, deben ser solo una opción cuando no es posible lavarse las manos con agua y jabón.

3. Gel sanitizante: propuesta de la OMS

La OMS elaboró una guía para la preparación de gel sanitizante. Sin embargo, la recomendación es que las formulaciones sean realizadas por farmacéuticos.
Ante el desabastecimiento de desinfectantes comerciales, la Organización Mundial de la Salud compartió cómo hacer un gel sanitizante, también conocido como alcohol en gel o gel antiséptico. Sin embargo, dicha entidad advierte que la preparación de este tipo de recetas es más difícil de lo que parece.

El inconveniente es que, si no se obtiene la concentración adecuada, puede ser ineficiente o causar una reacción indeseada en la piel. Es algo que no pasa con los geles comerciales, ya que su concentración es específica y está controlada y estandarizada.

Por lo anterior, la guía enfatiza que las indicaciones están dirigidas a la preparación de la formulación por los farmacéuticos y propone poner en texto en la pared del lugar elegido para la elaboración.

En concreto, se describe una formulación uno, que contiene etanol, peróxido de hidrógeno y glicerol; y una concentración dos que contiene alcohol isopropílico, peróxido de hidrógeno y glicerol. Las cantidades y el método de elaboración están disponibles en la Guía para la elaboración a nivel local: Formulaciones recomendadas por la OMS para la desinfección de las manos.

Alternativas no recomendadas al gel desinfectante

Respecto al uso de recetas naturales y caseras como alternativas al gel desinfectante, los expertos de la OMS y especialistas sanitarios señalan que son opciones poco confiables. Aunque han logrado gran difusión a través de redes sociales, no son recomendadas. En su lugar, es mejor asegurarse de lavar bien las manos con agua y jabón, varias veces al día.

CORONAVIRUS ¿Es posible volver a contagiarse de coronavirus tras curarse?

CORONAVIRUS
¿Es posible volver a contagiarse de coronavirus tras curarse?

Qué pasa si ya has pasado la infección por coronavirus?
¿Es posible volver a contagiarse?
Aquí te contamos algunos datos generales sobre él y lo que ocurre tras la infección.

¿Es posible reinfectarse por coronavirus?

Te contamos algunos datos interesantes sobre él y lo que se conoce hasta el momento sobre la posibilidad de volver a pillarlo, si bien los registros oficiales no han identificado ningún paciente reinfectado.

El coronavirus continúa manteniendo activadas las alertas sanitarias de muchos países. Cada día son más los casos registrados en todo el mundo. Pero, ¿qué pasa si ya has pasado la infección por coronavirus? ¿Es posible volver a contagiarse? Aquí te contamos algunos datos generales sobre él y lo que ocurre tras la infección.

¿Qué es el coronavirus?

Los coronavirus son una familia de virus que suelen afectar a animales. Dentro de esta familia hay muchos tipos diferentes. Algunos de ellos pueden mutar y acabar infectando a las personas.

Es el caso de la cepa SARS-CoV-2. Esta cepa se detectó por primera vez en la ciudad china de Wuhan en diciembre de 2019. Desde entonces, su facilidad de propagación ha hecho que el número de casos a lo largo de todo el mundo aumenten de forma drástica.

¿Qué síntomas produce?

Para la mayoría de personas infectadas, el coronavirus pasa como una infección asintomática. Es decir, la persona no presenta ningún signo que nos haga ver que está enferma. Lo más común, sobre todo en los niños, es que produzca síntomas leves e inespecíficos como un catarro cualquiera.

Los síntomas más evidentes son:

Tos seca

Fiebre

Sensación de falta de aire

También puede producir dolor muscular, cansancio y malestar general. Sin embargo, no siempre es así.

En una minoría de casos, este virus llega a producir una neumonía, o incluso hasta la muerte por fallo respiratorio. Estos casos se producen sobre todo en población susceptible como los ancianos, o con un sistema inmune deprimido.

La cepa de COVID-19 que se transmite en la actualidad es una mutación en la familia de los coronavirus

¿Cómo se transmite el coronavirus?

La transmisión del virus entre personas se produce por pequeñas partículas que viajan en el aire. Cuando una persona infectada tose o estornuda, estas partículas salen y pueden viajar 1 o 2 metros. El virus puede transmitirse incluso cuando la persona infectada no presenta síntomas.

Estas partículas pueden quedar en objetos de uso cotidiano como las mesas o los pomos de la puerta. O caer directamente sobre alguien. Cuando una persona que no está infectada toca algún objeto infectado y con sus manos se toca después manos, nariz o boca, el virus puede ingresar.

¿Se puede tratar el coronavirus?

Aunque aún no existe un tratamiento curativo específico para este virus, se están probando algunos antivirales, sobre todo para utilizarlos en los casos graves. Lo más importante, por tanto, será prevenir el contagio.

El tratamiento, además, es el de los síntomas. Se trata con analgésicos y medicamentos para la fiebre, en caso de que la misma se produzca. Hay que tener en cuenta que es un virus, por lo que los antibióticos nunca serán eficaces, y es una medida errónea utilizarlos como prevención o tratamiento.

Es importante recalcar que los antibióticos no son útiles para el tratamiento del coronavirus

Una vez que ha pasado la infección, ¿es posible volver a contagiarse?

Como ya hemos comentado, la mayoría de las veces la infección ocurre de manera asintomática o con síntomas leves. La mortalidad del virus es muy baja, oscilando en la actualidad entre el 1,4 y el 2,1 %. Esto quiere decir que en casi todos los casos la persona pasará la infección sin mayores consecuencias.

Pero, ¿qué ocurre después? ¿Es posible que una persona que ya ha pasado el coronavirus pueda volver a infectarse?

Ya que es una nueva cepa, aún nos falta mucho por saber. Aún así, hasta ahora todos los casos nuevos corresponden a personas que se han infectado por primera vez. No hay ningún registro oficial de alguien que se haya reinfectado con el virus.

Es decir que, aunque tengamos poca información al respecto, los expertos, basándose en los datos de los que disponemos hasta el momento, sospechan que es muy improbable que una misma persona pueda padecer dos veces esta misma enfermedad.

A tener en cuenta

Ante esta situación tan nueva para todos y aparentemente tan grave, lo importante es mantener la calma. Hacer caso a las autoridades sanitarias e intentar en todo lo posible llevar a cabo las medidas de precaución que están en nuestras manos son las acciones realmente urgentes.

sábado, 11 de enero de 2020

Las 12 Leyes del Karma que afectan tu vida aunque no lo quieras




Las 12 Leyes del Karma que afectan tu vida aunque no lo quieras

Karma es una palabra sánscrita que significa acción. Las leyes de Karma son un equivalente a la ley de Newton que menciona que “toda acción debe tener una reacción”. Cuando pensamos, hablamos o actuamos, iniciamos una fuerza que reaccionará en consecuencia. Esta fuerza de retorno puede ser modificada, cambiada o suspendida, pero la mayoría de la gente no está capacitada para erradicarla.

Esta ley de causa y efecto no es un castigo, es exclusivamente una reacción energética universal ante una energía emanada por nosotros mismos. He allí el aprendizaje: Debemos estar conscientes cien por ciento de lo que emitimos al universo.

Una persona no puede escapar de las consecuencias de sus acciones, y sufrirá si él mismo ha creado las condiciones para su sufrimiento. La ignorancia de la ley no es excusa, igualmente actúan tal como la ley de gravedad.

Conoce las 12 leyes del karma y controla tu vida:
Para dejar de tener miedo y empezar a tener poder en tu mundo, necesitas saber todo sobre las leyes kármicas. Aquí hay 12 Leyes del Karma poco conocidas que cambiarán tu vida:

1. La Gran Ley: “Lo que siembras, lo cosechas”.

Esto también se conoce como la “Ley de Causa y Efecto“. Se refiere a que lo que sea que emitimos hacia el Universo, es lo que regresa a nosotros, pero magnificado, ya que la energía se expande en forma de espiral.
Si lo que queremos es Felicidad, Paz, Amor, Amistad… Entonces debemos SER Felices, Pacíficos, Amorosos y ser un Verdadero Amigo.

Lo que das, recibes.

2. La ley de la Creación:

La vida no se trata de, simplemente, esperar ser feliz, pues para lograr esa felicidad se requiere de nuestra “creación”, es decir, nuestra participación.
Somos uno con el Universo, tanto por dentro como por fuera, así que lo que sea que nos rodea nos da pistas constantemente de nuestro estado interior. Sé tú mismo, y rodéate de todo aquello que quieres tener presente en tu Vida.

3. La ley de la humildad:

Lo que te niegas a aceptar, continuará manifestándose en ti. Si lo que vemos es un enemigo o alguien con un rasgo de carácter que nos parece negativo, entonces nosotros mismos no estamos enfocados en un nivel de existencia más alto. Debemos entonces aumentar nuestra vibración.

4. La ley del crecimiento:

“Dondequiera que vayas, ahí es donde siempre estás”

Para que podamos crecer en espíritu, debemos cambiar desde adentro de nosotros mismos, y no a las personas, lugares o cosas a nuestro alrededor.
Lo único real que tenemos en nuestras vidas es a “nosotros mismos“, y ese es el único factor sobre el que tenemos control. Cuando cambiamos, y entendemos quiénes y qué somos, dentro de nuestro corazón, nuestra vida cambia también de camino.

5. La ley del derecho de responsabilidad:

Reflejamos lo que nos rodea, y lo que nos rodea nos refleja… esta es una Verdad Universal. Debemos asumir la responsabilidad de lo que hay en nuestra vida. Somos responsables de nuestros éxitos, nuestros fracasos y nuestros sentimientos.

Siempre que existe algo malo en tu vida, ten por seguro que hay algo malo en tí.

Ser responsable de cada palabra, acción y emoción, nos acerca a la paz interior.

6. La ley de la conexión:

Es muy importante saber que todo en el Universo está conectado, que cada paso lleva al siguiente, y así sucesivamente.

Alguien debe hacer el trabajo inicial para comenzar un trabajo. Ni el primer paso ni el último son de mayor importancia, ya que ambos son necesarios para llevar a cabo la tarea. El Pasado, Presente y Futuro… están todos conectados…

7. La ley del enfoque:

No puedes pensar en dos cosas al mismo tiempo. Cuando nuestro enfoque está en los Valores Espirituales, es imposible que tengamos pensamientos más decadentes, como la avaricia o el enojo

8. La ley de dar y la hospitalidad:

Si crees que algo es verdad, entonces en algún momento de tu vida se te pedirá que demuestres esa verdad en particular… Aquí es donde ponemos lo que DECLARAMOS que hemos aprendido, en la PRÁCTICA real.

La vida se resume en dar y recibir. Si eres una persona que DA, que entrega su amor y compasión a los demás, entonces estás blindada y siempre vas a recibir las bondades del universo.

9. La ley del aquí y el ahora:

Mirar hacia atrás para revivir lo que fue, nos impide estar totalmente en el AQUÍ Y AHORA. Viejos pensamientos, viejos patrones de comportamiento, viejos sueños… Evitar que tengamos lo nuevo.

Lograr estar en el presente es algo bastante complicado en estos tiempos tan vertiginosos, pero aprendiendo a aplicar el enfoque, la relajación y la concentración, podremos valorar mucho más cada instante de nuestra vida, y vivir conscientes de todo lo que nos rodea y de nuestro interior.

10. La ley del cambio:

Las circunstancias se van a repetir hasta que logres trascender el aprendizaje que trae para ti. Esta ley implica responsabilidad, ya que cada elección que tomemos la debemos realizar desde la bondad y la humildad, evitando siempre el hacer daño a terceros, y evitando ir en contra de nuestra verdadera esencia.

Esto sólo es posible a través del autoconocimiento, ya que solamente cuando seamos capaces de entendernos a nosotros mismos, podremos hacer fluir todos aquellos cambios que van a ir construyendo nuestro verdadero destino.

11. La ley de la paciencia y la recompensa:

Todas recompensa viene de un esfuerzo inicial. Las recompensas de valor duradero requieren un trabajo paciente y persistente. La verdadera alegría sigue a hacer lo que se supone que debemos hacer y a esperar que la recompensa llegue en su momento.

Nada llega así porque sí, y nada sucede sólo porque el destino o la suerte lo decida, y aunque algunas circunstancias puedan parecer mágicas casualidades, lo cierto es que responden a una causa original. Somos los creadores de nuestro presente, y nuestro futuro, por ello el coraje, la determinación y el esfuerzo, son garantías inequívocas de el éxito más rotundo.

12. La ley de significación e inspiración:

Te recuperas de algo, sea lo que sea que hayas puesto en ello. El verdadero valor de cualquier cosa es directamente proporcional a la intensión y la energía que en eso pones. Tu contribución personal implica una contribución al universo… si ésta es mediocre, no tendrá el impacto esperado y se disolverá en la nada.

Todo aquello que hagas con amor y entrega, repercutirá en la resonancia universal y creará más amor y más beneficios para ti y tu entorno.

Si le damos valor a cada tarea, invirtiendo en ella nuestros mejores recursos personales, ocurrirá la magia.

Creas o no en la filosofía, éstas leyes del karma están actuando en tu vida. Es como la ley de gravedad, está allí, y lo sabemos.

Entender las leyes del Karma es entender la vida y aprender a vivir de manera consciente, en armonía con el todo.